JOSÉ MARÍA VELASCO (1840-1912)
José María Velasco es el pintor de paisajes más célebre de la historia del arte en México. Su carrera inició en un momento en el que la pintura giraba en torno a composiciones religiosas e históricas protagonizadas por figuras humanas, por lo que su dedicación y talento para documentar fielmente la naturaleza lo convirtió en un artista revolucionario para la época. Sus trazos precisos y su sensible paleta de colores han
transformado a sus cuadros en recursos históricos y geográficos para estudiar los efectos de la explosión demográfica en el centro de México en los últimos 150 años.DR. ATL (1875-1964)
Gerardo Murillo, mejor conocido como Dr. Atl, fue un paisajista, escritor y vulcanólogo que destacó entre los pintores mexicanos. Tras estudiar pintura, filosofía y leyes en Europa, hizo un llamado en favor del desarrollo de un arte público que abordara los problemas e intereses de la sociedad, por lo que es considerado uno de los precursores del muralismo mexicano. Fue una figura clave en la transición de la influencia europea de principios del siglo XX hacia la apreciación del arte popular mexicano en el periodo posrevolucionario. Además de sus espectaculares pinturas de paisajes volcánicos, su pasión por este tema lo llevó a documentar la erupción del Paricutín, uno de los volcanes más jóvenes del mundo, en 1943.
JOSÉ CLEMENTE OROZCO (1883-1949)
Las obras de José Clemente Orozco–uno de los grandes exponentes del muralismo mexicano junto con Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros– abordan temas como ritos prehistóricos, las raíces culturales de los pueblos indígenas del occidente de México, la opresión ejercida por los conquistadores españoles y la lucha independentista desde una perspectiva expresionista que se cruza con el realismo social. Orozco, un pintor comprometido con las causas sociales, es recordado por su estilo dinámico con una tendencia dramática, presente especialmente en los murales del Hospicio Cabañas.
DIEGO RIVERA (1886-1957)
Diego Rivera es recordado por sus murales con temática social, plasmados en edificios públicos de México y Estados Unidos. Este pintor demostró un interés por las artes desde pequeño, lo que le valió el apoyo para viajar a Europa para estudiar el trabajo de grandes maestros como Goya. Estas vivencias le permitieron experimentar con el cubismo y el postimpresionismo de primera mano antes de adoptar un estilo claramente modernista. Su obra, caracterizada por una vibrante paleta de colores, retrata el pasado y presente de México a la vez que celebra la lucha obrera a nivel mundial.
SATURNINO HERRÁN (1887-1918)
En su corta vida, Saturnino Herrán desarrolló un estilo figurativo con alegorías profundas que le valió convertirse en un pilar de la corriente indigenista y un precursor del muralismo mexicano. “Herrán, célebre representante del modernismo plástico mexicano, se nutrió de tendencias internacionales para retratar tanto exotismos y simbolismos como figuras de la vida cotidiana y de la gente común, que configuraron en sus pinturas un imaginario del ‘alma nacional’”, dice el Museo Nacional de Arte.
DAVID ALFARO SIQUEIROS (1896-1974)
David Alfaro Siqueiros, uno de los grandes exponentes del muralismo mexicano, es recordado por su estilo dinámico. Sus obras, caracterizadas por trazos gruesos de color negro y una paleta de colores encendida, expresan emociones intensas a través de una mezcla entre la tradición mexicana y elementos del surrealismo y el expresionismo europeo. Comprometido profundamente con los ideales socialistas, Siqueiros buscaba el balance entre las técnicas pictóricas y la revolución tecnología de la época para inspirar a los sectores más vulnerables.